En Équilibre
La pureza de la línea, la fuerza de los volúmenes, la armonía de los colores: para Cartier, todo es cuestión de equilibrio.
Al servicio de las piedras, esta búsqueda de la precisión está en el corazón de la nueva colección de Alta Joyería de Cartier.
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En el centro de este collar, que rinde homenaje a la estética art déco, se encuentra un diamante de talla rectangular de 8,15 quilates. A su alrededor, 20 diamantes de forma similar forman un conjunto excepcional, montados sobre una estructura radiante compuesta por elementos simétricos separados por detalles de ónix.
Este collar combina un zafiro de Ceilán talla pera de 11,70 quilates con ocho esmeraldas de Zambia con un total de 8,94 quilates en un acorde cromático característico. El diseño se despliega en una serie de motivos gráficos que realzan la forma de cojín de las esmeraldas.
En el centro, un zafiro de Madagascar de 41,85 quilates azul oscuro. A su alrededor, suaves ondas, notables por su volumen, están compuestas de diamantes y zafiros calibrados, que crean profundidad.
Colocadas con majestuosidad, dos ópalos destilan su iridiscencia multicolor por todo el collar. En los zafiros de tres colores que enmarcan cada ópalo, se reiteran los reflejos rojos, naranjas y amarillos. Sobre el collar, trabajado como una malla de oro amarillo y rosa, los zafiros de Umba le confieren continuidad a esta cálida ola de luz.
Dos imponentes esmeraldas se combinan con un inusual conjunto de rubíes esculpidos en una original talla barroca. A través de esta composición de inspiración botánica, Cartier ofrece una nueva exploración del emblemático motivo Tutti Frutti.
Con sus penetrantes ojos de esmeralda, una serpiente impresionantemente realista guarda orgullosa una aguamarina excepcional de 51,70 quilates. Los diamantes kite añaden un toque gráfico al collar, mientras que las aguamarinas y las turmalinas aportan ritmo y movimiento.
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Sobre un conjunto tan ligero como un velo, Cartier ha colocado una escala de diamantes y zafiros de color. La delicada labor de orfebrería con el oro rosa da la impresión de que las piedras se posan directamente sobre el cuello.
Con ónix, diamantes y calados, el emblemático animal de Cartier se sublima con un encaje lleno de volumen. La expresión de un savoir-faire único de los joyeros de la Maison en torno a la pantera.
La Panthère Dentelée, secretos de la creación
Desciframos una creación deslumbrante cuya belleza se revela a través de sus preciosos detalles.
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Este collar capta la esencia del leopardo de las nieves: único y esquivo. En un trampantojo, la cabeza del felino aparece o desaparece gracias al juego de líneas según el ángulo desde el que se mire.
Tres esmeraldas octogonales de Colombia forman el eje central de un entramado geométrico. El vacío de la paleta se realza con una combinación de tres colores emblemáticos del estilo Cartier: negro, blanco y verde.
Un excepcional zafiro de Ceilán, un cabujón de 58,08 quilates, inspira a Cartier para crear un conjunto cuya estructura calada recuerda el pavoneo de un pavo real y sus vibraciones.
Este anillo, con un rubí de Vietnam talla cabujón de 6,98 quilates, crea una impresión de flexibilidad y fluidez.
El emblemático acorde verde-rojo-negro de la Maison brilla a partir de una rubelita talla cabujón de 25,54 quilates. A su alrededor, cabujones de esmeralda, cuentas de rubelita y toques de ónix alternan simetría y asimetría.
Siempre es una cuestión de precisión cuando se trata de piedras: la armonía está en todas partes. Esta visión se materializa en dos creaciones: un anillo gráfico con dos diamantes talla escudo y otro dominado por un zafiro de Ceilán de 13,35 quilates.
Colores intensos y volúmenes asertivos: Cartier interpreta a su pantera de forma realista en este collar en el que aparece posada sobre un cabujón de coral, o en el anillo, a través de la abstracción de una puntuación de manchas de ónice.
Lo esencial y punto, esa es la intención creativa de este conjunto. El refinado diseño presenta un trío cromático emblemático de las creaciones joyeras de Cartier: negro, blanco y verde, a juego con una talla poco común, la talla troidia.
