Juste un Clou
La pulsera Juste un Clou es, ante todo, un clavo. Un clavo transformado en una pieza de joyería.
Diseño
La pureza de la línea sublima un simple clavo en una pieza excepcional.
El diseño de la pulsera Juste un Clou se impone con un trazo. El deseo de Cartier de llevar el objeto a su expresión más depurada: la estructura de un clavo cuya lectura es inmediata, comprensible a primera vista.
La leyenda y
la historia
Creada en 1971 en Cartier Nueva York, la pulsera Juste un Clou se llamó entonces la pulsera Nail. Cuando la pulsera volvió a aparecer en la década de 2000, la pureza de sus líneas le valió el nombre de Juste un Clou. En la actualidad, la colección se presenta en oro amarillo, rosa o blanco, con una cabeza de tornillo con o sin diamantes. Además, se enriquece con anillos y broches, collares o pendientes.
Juste un Clou
Anillos Juste un Clou
Pulseras Juste un Clou
Pendientes Juste un Clou
Collares Juste un Clou
Juste un Clou
Reinventada constantemente
La pulsera Juste un Clou, una pieza de diseño cuyo trazo se impone como una evidencia en todas sus variaciones.