Panthère de Cartier
Indomable y salvaje, la pantera fascina. Su poder de atracción es todavía más fuerte por su componente paradójico: a la vez depredadora y protectora, es la guardiana de un territorio secreto donde coexisten la vitalidad y la belleza del mundo. En su última campaña, Cartier sigue el rastro original de su animal favorito, encarnado por Vanessa Kirby, embajadora de La Panthère.
La cabeza de la pantera
Cada detalle de la pantera es sometido a análisis: el espacio entre el hocico y los ojos, la curva que rodea el ojo, la mejilla abombada pero no en exceso para evitar delinear el ojo. Los ojos, su proporción y su ubicación determinan la personalidad de una pantera. La cabeza de la pantera transmite desafío, fuerza y libertad.
El savoir-faire de la Panthère
El diseño, la elección de las piedras, el pavé, el engaste, todos los gestos contribuyen al mismo objetivo: dar vida al animal.
El objetivo no es imitar a la naturaleza, sino rendirle homenaje, conferir un soplo de vida al animal y dotarlo de una personalidad.
La Panthère de Cartier
La Pantera, animal emblemático
La huella de la Panthère es un símbolo de la creación Cartier desde 1914, cuando hizo su aparición en un reloj con motivo de manchas.
Un perfume, una pantera
Un gran clásico de la perfumería que se atreve a reinterpretar el mítico chipre con un acorde floral felino inédito.
Panthère de Cartier
La Panthère de Cartier vigila con intensidad los exquisitos relojes de la Maison.
