EL SAVOIR-FAIRE JOYERO
En Cartier, el savoir-faire es un diálogo entre la técnica y la creatividad, un vaivén constante entre diseñadores, relojeros, joyeros, engastadores, pulidores y lapidarios. Para Cartier, la importancia del savoir-faire nace en esta unión del saber y del hacer.
COMBINAR LA TÉCNICA Y LA VIDA
Una serpiente hipnótica de increíble flexibilidad cuya belleza Cartier sublima y pone de manifiesto la presencia animal del reptil sobre la piel.
AUNAR LA DENSIDAD
Y LA LIGEREZA
A partir de tres ópalos de Australia y una multitud de piedras, los artesanos de Cartier han creado una impresión de ingravidez, la ligereza de lo efímero, similar a las alas de una mariposa.
CONVERSACIONES SOBRE EL SAVOIR-FAIRE DE CARTIER
Todo lo que siempre has querido saber sobre la Alta Joyería de Cartier: la actriz Golshifteh Farahani entrevista a Pierre Rainero, director de imagen, estilo y patrimonio de Cartier.
EL VOLUMEN Y LA FLEXIBILIDAD
Dotar a una creación compleja de una increíble fluidez sobre la piel: este es el desafío que plantea el collar Synesthésie, tejido hasta la espalda como si fuera un encaje totalmente articulado.
EL ARTE DEL ENSARTADO
El reto de este collar de la colección Sixième Sens par Cartier consiste en respetar la elegancia del diseño al mismo tiempo que se garantiza la caída sumamente natural del collar. También se trata de crear la consonancia perfecta entre las esmeraldas, todas ellas diferentes: ordenarlas, clasificarlas y armonizarlas, según criterios precisos de color, diámetro y grosor. Asimismo, el ensartado constituye un delicado savoir-faire que radica en hacer, deshacer y rehacer. Anudar los hilos varias veces y ensartar las piedras pequeñas con sumo cuidado.
EL ESTILO TUTTI FRUTTI
La composición de este collar reside en la armonía de los colores. El cometido de los talleres es recuperar la naturalidad de las ramas y los brotes mediante una explosión de motivos florales, frutales o de palmetas, bolas lisas y acanaladas, rubíes, zafiros y esmeraldas. El reto consiste en combinar diversas piedras grabadas, todas ellas diferentes, cuyos grabados florales se realizan siguiendo la técnica desarrollada por los mogoles en el siglo XVII. Esta pieza forma parte de la gran tradición de joyas transformables que se pueden modular a voluntad en un colgante, un broche o un collar de manera imperceptible.
TALLAR EL CORAL
La talla del coral, material de una gran delicadeza, constituye por sí sola una hazaña. No hay momento en el que el material no corra el peligro de romperse. En el brazalete Panthère Tropicale, la dificultad se ve incrementada por la elección de un radiante motivo acanalado, realizado en minúsculas placas de coral.
EL ARTE DE LA TRANSPARENCIA
La transparencia se convierte en un arte con el collar Tillandsia: dos berilos excepcionales parecen flotar sobre una red de diamantes. Diseñador y joyero se unen para crear efectos de profundidad que continúan hasta el cristal de cuarzo rutilado.
ARMONIZAR LOS VOLÚMENES
Armonizar los volúmenes, tallas y materiales es el reto del collar Hemis, que se consagra al arte del lapidario en torno a ópalos de forma barroca y una kunzita de gran tamaño.
EL ACOPLAMIENTO DE DIAMANTES EXCEPCIONALES
Alrededor de dos diamantes de más de 26 quilates, brillan 107 diamantes con una misma intensidad y un mismo resplandor. Una proeza realizada por los lapidarios, los joyeros y los expertos en piedras, que son testigos del nacimiento de un conjunto hipnótico, lo máximo en joyería.
PIEDRAS PRECIOSAS DE COLOR
Los expertos de Cartier han buscado y detectado las piedras más bellas procedentes del corazón de la Tierra, las que compondrán las armonías sutiles de un collar vivo, reflejos cambiantes de las profundidades del magma.
REVELAR LA LUZ
En Cartier, la piedra guía la creación, y aún más cuando se trata de anillos engastados con diamantes. Es la piedra la que determina la elección de la montura, y no a la inversa. El metal, diseñado para desaparecer, realza el brillo de las piedras. La perfección absoluta es la firma de Cartier.
UNA ARQUITECTURA EN MOVIMIENTO
Lograr el equilibrio entre volumen y ligereza, flexibilidad y duración. Los joyeros, engastadores y lapidarios, dejándose guiar por las piedras, han creado un material fluido y lleno de vida sobre la piel, una arquitectura en movimiento de una complejidad hipnótica.
LA PANTERA EN MOVIMIENTO
Desde 1914 y la primera aparición de la pantera, los artesanos joyeros de la Maison exploran el arte de dar vida a este felino. Músculos, cabezas y patas: a través de la escultura, el detalle se estiliza y la fuerza se libera. Juntos observan el movimiento vivo y juntos consiguen que adquiera un carácter tridimensional.
SERTI PELAGE
Para la pantera, los artesanos de Cartier utilizan la técnica del serti pelage, un arte propio de Cartier. Una a una, las manchas del animal, de ónix o zafiros, se tallan a mano en un diseño único. El joyero las envuelve de granos de metal que pliega en minúsculos hilos sobre la piedra. El pelaje es tan real como la naturaleza misma, el material cobra vida y despierta emociones.
SELECCIONAR LOS DIAMANTES
Un diamante Cartier es el encuentro entre los criterios de selección más exigentes y el "ojo" experto de Cartier. Un talento y una experiencia únicos que permiten identificar de entre las gemas más extraordinarias, aquellas con una esencia adicional. La diferencia Cartier.